Se cree que eliminando la competencia se oculta la incompetencia

Se ha iniciado un nuevo proceso de carnetización, y en base al procedimiento recibido nos permitimos realizar el respectivo análisis crítico-técnico sobre el mismo, algo que queda para su feed-back considerando además la experiencia en el tema:

Sobre el período:
“1 de Julio del 2009 y finalice el 15 de Diciembre del 2009”

Éste es un período que causará un doble gasto. Lo ideal era mantener un período de transición mucho más largo que uno más corto que no necesariamente por generar la mitad de un costo será más barato o no se tenga que cubrir. Y cuando hablamos de costos no necesariamente nos referimos al valor monetario de la inscripción, sino también al esfuerzo producido (horas hombre) y que puede ser mejor empleado. Hay que considerar que en muchas de las ocasiones así se logran más grandes beneficios con los mismos que ya se cuentan, ampliando coberturas e incluso mejorando rendimiento. Algunos de los cuales no se mencionarán por cuanto al momento ya no tiene caso, pues las decisiones “ya las han tomado”.
Tampoco es un pretexto el tema de las Asambleas. Se podían manejar cortes temporales dentro de un proceso de membresía más largo, tal como se realiza en el sistema utilizado para las Asambleas Extraordinarias, las cuales se desarrollan dentro de un proceso de membresía.
Recordemos que una transición no necesariamente implica truncar un proceso. La idea de reforzar implica mejorar procesos y ampliar participación.
La única preocupación que me queda es sobre nuestros hermanos de la Costa, quienes posiblemente sean los más afectados en el cambio de período de membresía, el cual podía realizarse hace mucho mismo pero en vista de los ciclos que se mantienen en dicha región, la idea de un cambio de fechas de períodos de inscripción no se dio prioridad por cuanto en lugar de beneficiar coartaría la posibilidad de participación. Quizá una mejor vista estadística nos permita visualizar aquello o el futuro cercano que se avecina.

Sobre los formularios:
“Estos formularios deberán ser llenados y enviados previo al pago de inscripciones y estarán abiertos en la página web hasta 15 de diciembre.”

No se entiende el motivo por el cual se requiere que dichos formularios sean llenados y enviados previos a un pago. No es más costoso mantener papelería e información quizá innecesaria de posibles personas que no lleguen a inscribirse nunca, lo cual permitiría realizar malos cálculos o proyecciones sobre la cantidad de personas esperadas. Siempre ha sido posterior a un pago, lo cual permite cuadrar el número de personas a inscribir vs. los valores cancelados.

Sobre el trámite:
“Los Grupos Scouts podrán realizar el trámite de inscripción directamente en la Oficina Nacional, y deberán contar con la aprobación del Comisionado Distrital”

Ésta si es una frase que sorprende y se nota que fue hecha sin sentido o con el total desconocimiento de una verdadera realidad nacional que se da en TODOS los Distritos del país.
Cuando ya se creía que se había soltado el “caudillismo” de la dependencia de una aprobación de una persona que en muchas de las ocasiones puede llegar a tener una visión escasa o nula o simplemente algún conflicto con algún grupo scout. Este criterio por ende va en contra del principio de gobernabilidad: “la participación”.

Jamás, ni siquiera en las élites scout mundiales, las decisiones de participación las toma una sola persona. Este es un terrible error en este procedimiento que al parecer fue hecho con visión distrital. Si en tal caso se quería poner un control, éste debió darse a nivel participativo y colegiado también, que quiere decir esto, que debió ser con la aprobación de un “Consejo Distrital” y mas no a través sólo de un Comisionado Distrital que posiblemente jamás visitó un Grupo de su territorio.

¿Quién garantiza que se tomó una correcta decisión?,
¿Cuáles son los parámetros para una decisión correcta y que no fue “a dedo”?,
¿Cuál es el esquema para la decisión?,
¿Qué sucede con los grupos nuevos, antiguos, en reestructuración, etc.?,
¿Qué sucede con los grupos partidarios de la línea de izquierda u oposición o en desacuerdo democrático con un Distrito?

Para pensarlo verdad. Vamos encontrando más errores de conceptualización, que al parecer buscan beneficiar ciertas instancias.

Sobre el aval de Grupos:
“Para este período el Jefe de Grupo (y opcionalmente el Consejo de Grupo) deberá tener una entrevista con su respectivo Comisionado Distrital, en la cual se informe:
- la situación del Grupo Scout
- la participación en la Asamblea de Distrito y los Consejos Distritales
- la participación de sus miembros beneficiarios en las actividades organizadas por el Distrito/ASE
- la participación y/o colaboración de sus dirigentes en las actividades organizadas por el Distrito/ASE

- y no adeudar nada al Distrito”

Éste ítem ratifica lo mencionado anteriormente. Este es un procedimiento de registro e inscripciones, mas no un método para suplir actos reactivos. Es decir, esta es la función y tarea del Comisionado Distrital que se determina ya en el Reglamento y en el Estatuto y no se puede registrar en un procedimiento como un requisito el cumplimiento de una acción dirigida desde el mismo Comisionado, la cual debe ser PROACTIVA.
Jamás un aval va a resultar de una entrevista. Quien dirime en caso de conflicto? Y tampoco justifica la búsqueda de compromisos o acercamientos entre ambas partes por aprovechar el proceso de registro y carnetización. Nuevamente se demuestra que este procedimiento no contiene una realidad nacional y demuestra una visión distrital muy reactiva y poco profunda.

Estos ítems lo único que hacen es engrandecer y endiosar la figura de una persona a quien como su nombre lo dice es únicamente un comisionado, y que aparte de sus obligaciones ya enmarcadas ahora se le da la responsabilidad de decisión, la cual no necesariamente puede ser acertada. Si se quiere trabajar en forma participativa nuevamente debió entrar la figura del consejo de distrito.

Recordemos la competencia de “Trabajo en Equipo”. La ASE mas bien está metiéndose en más problemas políticos de los que ya tiene al poner este cuello de botella.

Sobre los miembros:

“Miembros Activos a nivel de Distrito y Asociación
- Se consideran miembros activos a los Dirigentes de Distrito o Asociación que acrediten la elección o designación del órgano correspondiente.
- Deben acreditar su capacitación como dirigentes de acuerdo al reglamento de formación en la línea de acción que su cargo lo requiera.
- Deben inscribirse por intermedio del Comisionado Distrital o del Director Ejecutivo de acuerdo al caso.
- A excepción de los Consejeros Nacionales no se aceptarán inscripciones directas en la Oficina Nacional.

Miembros Colaboradores a nivel de Distrito y Asociación
- Se consideran miembros colaboradores a los antiguos scouts, padres de familia, asistentes religiosos y otros adultos que apoyan las tareas educativas del Distrito o Asociación.
- No hay restricción en el número de miembros colaboradores que un Distrito desee inscribir.
- Deben inscribirse por intermedio del Comisionado Distrital o del Director Ejecutivo de acuerdo al caso.
- No se aceptarán inscripciones directas en la Oficina Nacional.
Los Grupos que durante dos periodos consecutivos no estuvieren inscritos perderán su antigüedad y tanto el nombre como el número de Grupo pasarán a disponibilidad del respectivo Distrito al cual pertenezcan.”

En ninguna circunstancia se ha visto dicha división orgánica de miembros, de hecho, ni el Reglamento ni el Estatuto lo menciona. Hay muchas líneas de dirección que se salta el procedimiento sin respetar la pirámide de gestión. Es más en la parte distrital, se está llenando un vacío que legalmente no consta en el reglamento o estatuto. Jamás un miembro activo será aquel que acredite una elección o designación. Lo que prima es el nivel de capacitación y luego el proceso eleccionario o designatario.

Tampoco existen miembros colaboradores a nivel de distrito. Para ello deben pertenecer a un grupo scout. El distrito no es un grupo scout. Parece ser que queda relegada la figura del Director de Operaciones.De igual manera la disponibilidad de nombres y números no es manejada por un Distrito sino por una Dirección de Operaciones que maneja el archivo nacional y pone en consideración de un Comité Ejecutivo Nacional, tal como lo indica el Reglamento y Estatuto. De esta forma se evitan los roces y fricciones locales.